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Expertos consideran la propiedad intelectual y la innovación como elementos esenciales para el desarrollo del país
SANTO DOMINGO. –La propiedad intelectual y los niveles de innovación son elementos esenciales para el desarrollo de los países, así lo consideraron Víctor Gómez Valenzuela, vicerrector de Investigación y Vinculación del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC); Ruth Lockward, directora de la Oficina Nacional de Propiedad Intelectual (ONAPI), y Laura del Castillo, directora Técnica del Consejo Nacional de Competitividad, al participar en la conferencia “Propiedad Intelectual e Innovación aplicada para el Desarrollo”, realizada en el INTEC.
Gómez Valenzuela destacó, que el porcentaje de la fuerza laboral como educación primaria, secundaria y universitaria, el índice de innovación y el grado de protección de la propiedad intelectual, son variables que explican en un 95% el nivel de renta per cápita de las economías en sus distintas etapas de desarrollo.
El académico dijo que detrás de ello están los sistemas de educación, las capacidades científicas y tecnológicas; el poder, la calidad y la fuerza de las universidades y, además, la interacción de las universidades con los sectores productivos, a través de procesos de transferencia de conocimiento.
“La diferencia en efecto de productividad y generación de riqueza se acentúa en la medida en que varían los niveles de desarrollo en las economías, es decir, que, en aquellas economías de alta renta el esfuerzo en innovación es más intensivo respecto a las capacidades científicas y tecnológicas”, ponderó Gómez Valenzuela.
En las economías en fase de desarrollo, como República Dominicana y otras del Caribe, las empresas se comportan todavía de forma tímida, con respecto a la gestión de propiedad intelectual. Esto se debe, según Gómez Valenzuela, a que la actividad innovadora pese a ser interesante, no se canaliza adecuadamente, por un desconocimiento de las oportunidades en materia de propiedad intelectual y de los mecanismos de creación de valores, a través de procesos de aprendizaje.
Por tanto, Gómez Valenzuela enfatizó como necesario estimular el conocimiento y el uso de la legislación, crear una cultura de registro y de acudir a las oficinas de propiedad intelectual para canalizar ese potencial de innovación.
“Hay que crear la cultura de búsqueda, de creatividad, de conocer y de entender que los agentes que integran el sistema de innovación como las universidades, las empresas y las agencias públicas, deben hermanarse para crear una nueva visión del desarrollo mucho más fundamentada en el uso del conocimiento y la gestión de la propiedad intelectual”, puntualizó Gómez Valenzuela.
En ese sentido, Ruth Alexandra Lockward, directora general de ONAPI, consideró imposible pasar de ser un país de renta media a dar el salto a uno desarrollado sin entender y promover la propiedad intelectual.
“Es importante que integren las patentes como parte de la vida profesional, no importa cómo”, ponderó Lockward, quien resaltó que la protección de propiedad industrial es territorial, por lo cual se deben elegir los mercados de interés, y que el dominio público de República Dominicana es muy amplio por los pocos registros.
La directora del ONAPI resaltó que se debe pensar en propiedad intelectual como una sombrilla con dos grandes brazos; de un lado, los signos distintivos como las marcas, nombres comerciales, el derecho de autor, y del otro lado, las invenciones, que incluye patentes y diseños industriales.
La ejecutiva felicitó al INTEC por ser la única universidad que apoya el diseño industrial, y resaltó que a través de ONAPI realizan actividades para promoverlo. Además, agasajó a la academia por ser la primera en obtener una patente universitaria dominicana.
De su lado, Laura del Castillo, directora técnica del Consejo Nacional de Competitividad, aseguró que la clave para lograr subirse al tren de la cuarta revolución está en la innovación. “La innovación no es solo robots y maquinas, esta va de la mano con la educación”.
Del Castillo entendió que el país tiene un gran potencial de crear empleos y riquezas, a través de la generación y la explotación de la propiedad intelectual.
En cuanto a los procesos de innovación, la ejecutiva de Competitividad puntualizó que: primero, las economías deben enfocarse en traducir las inversiones de innovación en resultados, y segundo, existe una disparidad en innovación regional que obstaculiza el desarrollo económico y humano.
Además, enfatizó en la necesidad de promover las inversiones en innovaciones energéticas para evitar una crisis ambiental.