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Enseñanza universitaria más allá del saber científico
SANTO DOMINGO. “Enseñar una carrera o disciplina no será suficiente para poder adaptarse a los grandes cambios que se avecinan”, afirmó María Elena Córdoba, directora de Currículo del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC), durante el Quinto Seminario Internacional de Estudios Generales realizado en coordinación con la Red Internacional de Estudios Generales (RIDEG).
Al dictar la conferencia “Competencias y Estudios Generales”, reconoció que a primera vista puede haber incompatibilidad entre el anhelado currículo por competencias y la vocación de formación integral e integración de los contenidos y de voces no propias de la academia, que plantean los estudios generales. Sin embargo, aclaró que en el caso del INTEC, a partir de la reforma educativa del 2010, se atiende la preparación del profesional para el competitivo mercado laboral, pero dando prioridad a la formación humana y para toda la vida del egresado.
Córdoba indicó que para lograr una sinergia entre las competencias y los estudios generales, es indispensable asumir una concepción de competencias capaz de incidir en la mejora de la educación, que prioricen la integración de diferentes tipos de conocimientos y recursos psicosociales, que posibiliten trabajar para la autoformación más que para corregir, recuperar saberes populares, integrar conocimientos a fin de acercarnos a una explicación más integral del objeto de estudio, y lograr resultados que van “más allá” de las disciplinas.
“El ser humano puede ser competente, si es capaz de desarrollar una formación integral, con competencias para la vida”, expresó la docente. Además, indicó que los estudios generales derivan en la formación de seres humanos íntegros, críticos, con compromiso ético y ciudadano, que en un diseño por competencias consiste en construir un currículo pensado-practicado que respeta las subjetividades e incluye sectores y temas muchas veces invisibilizados.
Llamó a los profesores a asumir un compromiso ético con el estudiante, y una actitud que favorezca una reconstrucción curricular donde los valores humanos vayan de la mano con el saber científico.
Durante su ponencia, Córdoba enfatizó que el nuevo profesional que demanda la sociedad debe ser abierto a todo tipo de conocimiento y, ante todo, capaz de seguir aprendiendo a lo largo de la vida.
Recalcó que, con los estudios generales en la propuesta formativa, se favorece que los estudiantes aprendan a aprender basados en sus propias experiencias, sin discriminar la de los demás, a relacionarse mejor con su medio, a valorar la perspectiva de género, a actuar de manera autónoma y emprendedora.