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¿Cómo ganarle terreno a la desertificación y frenar la escasez del agua?
SANTO DOMINGO. -Para frenar la escasez del agua y aprovechar los recursos naturales, el primer paso que deben dar las autoridades en República Dominicana es empezar mañana y buscar la “rueda” que más se adapte a la realidad país, porque los medios están disponibles, solo falta decisión.
Así lo consideró David Schwartzman, especialista israelí, quien al dictar la charla “Experiencia de Israel en el combate a la sequía y casos exitosos Latinoamérica y el Caribe”, argumentó que lo mejor que le puede suceder a los dominicanos es que los países de la región se abastezcan de sus productos y esto se logra con una eficiencia en el uso del agua destinada a la agricultura.
Puntualizó que para frenar la falta de agua se necesita; primero, educar a los ciudadanos desde las escuelas para crear conciencia y, segundo, frenar la deforestación y fomentar de manera masiva la reforestación para contrarrestar la desertificación.
Además, planteó que se deben realizar buenas prácticas agrícolas, a través de la conservación de suelos, implementación de tecnologías de riego adaptadas al ahorro de agua y mejorar las producciones y tratamientos y utilización de aguas marginales, para devolverla por lo menos a la agricultura.
“Se debe evitar la contaminación de las fuentes de agua, especialmente de las subterráneas, hacer estudios de aguas subterráneas y uso de las mismas utilizando energía renovable, para adaptar cultivos al cambio climático y darle un tratamiento primario o secundario para que se puedan volver a utilizar”.
Sin embargo, Schwartzman consideró como insuficiente hacer un pozo y empezar a sacar agua, tiene que haber un control diario de cuánta agua se está usando; la calidad del agua para controlar que el líquido que llega a las casas sea lo más puro posible.
En la actividad, realizada por el Proyecto Resiliencia a la Sequía de la República Dominicana y el Observatorio de Cambio Climático del INTEC, Daniel Biran Bayor, embajador de Israel, afirmó que este país es regalo de Dios. “Hay que guardar el agua porque tenemos oro en la mano”, señaló.
“Llegamos a la casa y no nos preocupamos porque siempre hay agua, pero un día encontraremos agua con fuerte olor o tendrá otro color”, indicó.
En ese sentido, Schwartzman dijo que en Israel siempre se considera que existe sequía. “Allá hay una mentalidad de necesidad, aunque la mayor parte del mundo tiene la mentalidad de abundancia, y en esta última no hay preocupación y, por tanto, se les hace difícil adaptarse al cambio climático”.
En un video presentando por el expositor, se evidencia que las autoridades y el pueblo de Israel tomaron en cuenta que la agricultura es el mayor consumidor de agua en el mundo. La innovación israelí ayuda a los agricultores a crecer más con menos, a través del desarrollo de una tecnología para usar le agua con mayor eficiencia y así duplicarla, y para mayor producción de alimentos.
“Nos costó, pero seguimos porque el desierto no es un obstáculo. La clave está en adaptar los cultivos al desierto, por ejemplo, en los últimos tres años se implementó las plantaciones de banano, y en la agricultura utilizamos una tecnología de riego por goteo, que entrega la cantidad de agua directamente a las raíces donde y cuando es necesario”, dijo Schwartzman.
El expositor indicó que las autoridades de Israel crearon cuatro instituciones para el desarrollo del desierto: el Instituto Keren Kaiemet, y los centros de investigación y desarrollo Ramat Neguev, Rumsteak y Aravana. Y, hace más de 20 años se formó el Ministerio de Desarrollo del Desierto.
El 68% del territorio de Israel es desierto. Sin embargo, para los israelís esto no ha sido obstáculo, sus buenas prácticas le ganan terreno a la desertificación, señaló el experto.
“Tuvimos cinco años de sequía, pero no hubo problemas de agua. En Israel no existen bosques naturales, todos fueron plantados y, por ello, hay una ley bien estricta que establece que nadie puede quemar, ni cortar los árboles”, dijo.
Alguna de las acciones desarrolladas para aprovechar la desertificación, según el expositor israelí, fueron: el desarrollo de actividades por parte del gobierno para atraer inversiones, facilidades económicas y creación de fuentes de trabajo, plantación de bosques para detener la erosión y desarrollo de nuevas variedades de cultivos adaptados al clima del desierto.
Precio del agua
Israel tiene 1,200 pozos que se usa para agua subterránea. El precio del agua desalinizada cuesta 62 centavos de dólar por metro cúbicos de agua, pero el usuario tiene dos tarifas: con usos de hasta 3.5 metros cúbicos por persona por mes cuesta 1.7 dólar por metros cúbicos, y pasando es tope aumenta a 2.2 dólares por metro cúbico. Según el experto, en Israel, el 85% de aguas residuales del país son recicladas y tratadas de forma que podrían ser nuevamente potables.