Imparten taller de sensibilidad e interacción hacia personas con discapacidad desde un Enfoque de Derechos
SANTO DOMINGO- Los estudiantes y el personal administrativo del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC) recibieron un taller de sensibilidad e interacción hacia personas con discapacidad, desde un enfoque de derechos, impulsado por el proyecto ACCESS en el marco del programa Erasmus+ de la Comisión Europea.
La capacitación impartida junto al Consejo Nacional de Discapacidad (CONADIS) mostró los principales retos a los cuales se enfrentan las personas con alguna discapacidad y la protección con las que estas cuentan según normativas legales.
Rafael Tejada, licenciado en Educación mención Lenguas Modernas, y Greysi García, educadora con experiencia en lengua de señas, ambos representantes del CONADIS, abogaron por un lenguaje inclusivo en el que se sustituya el término “discapacitados” por “personas con discapacidad”. De igual modo, motivaron las buenas prácticas para la convivencia, fomentando el trato igualitario y respetuoso.
“La eliminación de barreras sociales y del entorno son las que garantizaran un mundo sin limitaciones”, aseguró la educadora Greysi García. Tejada también mencionó la necesidad de que en las universidades se incorporen alternativas inclusivas para estudiantes con discapacidades, entre ellas rampas para personas que usan silla de ruedas y traductores en lengua de señas.
“Imagínate ir al salón de clases y no entender nada de lo que están explicado, no escuchas nada, solo ves a los docentes impartir sus clases mientras tus compañeros participan, no entiendes nada, no te sientes parte”, comparó Tejeda al mencionar el caso de las personas con discapacidad auditiva.
En el marco legal, compartieron la Ley No 5-13 sobre discapacidad en República Dominicana, la cual ampara y garantiza la igualdad de derechos y la equiparación de oportunidades a todas las personas con discapacidad.
Asimismo, se encuentran los artículos 39 y 58 de la Constitución de la República Dominicana y la Convención Internacional sobre los Derechos de las personas con Discapacidad como referencias acerca del tema.
El proyecto ACCESS se ejecuta a través de la Unidad de Movilidad Institucional, y busca mejorar la accesibilidad, garantizar las condiciones de aprendizaje y fomentar el cambio de políticas hacia la inclusión de estudiantes con discapacidades en el contexto de la Educación Superior en Costa Rica, Cuba y República Dominicana, a través de prácticas modernas de inclusión, capacitación y trabajo colaborativo.
Entre sus objetivos, figura crear un marco moderno e inclusivo a través de la creación de Centros de Apoyo para estudiantes con discapacidades, estrategias a largo plazo para el acceso y retención de estos estudiantes en el sistema de educación superior y equiparlos con tecnologías de asistencia para mejorar la provisión de servicios para las instituciones del consorcio.
Algunas universidades que forman parte del proyecto son: Universidad de Alicante de España; Universidad de Macedonia en Grecia; Tecnológico de Costa Rica; Universidad Agraria de la Habana "Fructuoso Rodríguez Pérez" en Cuba, entre otras universidades de tales países.
El Consejo Nacional de Discapacidad (CONADIS), fue la institución que impartió la charla cuya misión es garantizar la igualdad de derechos, la equiparación de oportunidades y la eliminación de toda forma de discriminación hacia las personas con discapacidad.
Dinámicas grupales durante el taller
Al iniciar el taller, la psicóloga Miladys Serrano, coordinadora de Desarrollo Estudiantil del INTEC, dio participación a los estudiantes y en la segunda sesión a los colaboradores con una práctica para entender la discapacidad, en la cual se dividieron en grupos para conversar, pero algunos con los oídos tapados y otros con los ojos cerrados. En medio de la actividad intentaron comunicarse mientras los no videntes trataron de caminar por el salón.
“Estaba muy asustada, me iba a chocar con una pared y Ana no me guió bien”, fue la intervención de Karla, una de las estudiantes participantes que caminaba por el Auditorio de la Seguridad Social, donde ocurrió la actividad, sin ver nada, mientras Arturo se quejó al realizar la práctica con oídos tapados. “Mis oídos estaban más sanos que nunca, pero para chismear era incómodo. Me sentía excluido”.
Angelina, estudiante que fungió de guía, también contó su experiencia. “La persona que yo estaba guiando chocó dos veces con la silla. Chocaba con otras personas”, enfatizó.
