Desigualdades por género son constantes hasta la vejez

SANTO DOMINGO. Las desigualdades entre los hombres y las mujeres dominicanas se evidencian a lo largo de su vida en una serie de predisposiciones sociales que van desde ¿qué tipo de juegos puede practicar cada uno?, ¿Qué lugares de diversión pueden frecuentar? y ¿a qué edad deben estar casados y con hijos?

Las reflexiones son parte de los hallazgos de la investigación “Imaginarios de género en juventudes dominicanas” de Jeannette Tineo, los cuales fueron recogidos en un libro.  Un nutrido grupo de estudiantes de distintas carreras tuvo la oportunidad de escuchar sobre la investigación directamente de su autora y plantearle sus preguntas y comentarios.

El estudio, que es una colaboración entre el Centro de Estudios de Género del INTEC, OXFAM y la Diputación Floral de Bizkaia, España, tiene entre sus principales conclusiones: Los comportamientos “femeninos” y “masculinos” son mecanismos de validación frente a los adultos; las normas de género son instaladas desde la niñez, mientras a los niños se les exige fuerza y dominio de lo público, las niñas son llamadas a mantenerse en lo privado.

Además, ser mujer para las jóvenes sigue estando anclado en los principios de la maternidad y la familia, en tanto que para los jóvenes el valor fundamental de su masculinidad es su capacidad de tener cosas y de proveer.

Tineo advierte que la perpetuación de estas dinámicas entre los jóvenes se traducen en múltiples situaciones de acoso, violencia y abuso, en distintos ámbitos de la vida cotidiana. A su juicio, los jóvenes no cuentan con referentes para pensar diferente y practicar relaciones sociales distintas.